El Servicio de Atención Psicológica de la UCA ahonda en las pautas para detectar y prevenir conductas suicidas 21 abril 2025
Especialistas de la Unidad de Salud Mental de Hospital Universitario de Puerto Real insisten en la importancia de identificar y saber gestionar las señales de las personas en esa situación
El Hospital Universitario de Puerto Real (HUPR) ha impartido una jornada en la que se ha abordado la prevención de conductas suicidas. Organizada por la Unidad de Gestión Clínica de Salud Mental (UGC) del propio hospital, la sesión ha reunido a profesionales del Servicio de Atención Psicológica y Psicopedagógica (SAP) y del Departamento de Psicología de la Universidad de Cádiz, con el objetivo de reforzar su formación y preparación ante una realidad que, aunque silenciada con frecuencia, está más presente de lo que comúnmente se percibe.
“Escuchar”, “entender”, “ayudar” y “empatizar” han sido los verbos más usados en la sesión, que ha contado con el respaldo de profesionales con experiencia clínica y formación especializada. Se ha recalcado que hablar de suicidio sigue siendo un tabú, ya que muchas veces se desconoce cómo actuar cuando alguien del entorno muestra señales de alarma. Así, se ha destacado que identificar esas señales con antelación y saber guiar a quien atraviesa este proceso puede ser clave para prevenir un desenlace fatal.
A lo largo de la charla se han desgranado conceptos fundamentales para entender que el suicidio no es un acto repentino ni aislado, sino un proceso complejo que puede comenzar con una ideación difusa y evolucionar hasta una planificación concreta. En la mayoría de los casos, la persona no desea morir: lo que pretende es que el dolor que experimenta, termine.
También se ha insistido en que el suicidio es un fenómeno multicausal donde influyen cuestiones psicológicas, sociales, biológicas o una combinación de todas ellas. Un dato que ha impactado especialmente fue el que revelaba que, por cada suicidio consumado, se estima que se producen unas veinte tentativas. Y se ha ahondado en la importancia del seguimiento de los afectados, ya que si alguien ha intentado quitarse la vida, el riesgo de que vuelva a hacerlo es considerablemente mayor.
Los participantes también han trabajado habilidades prácticas a través de dinámicas de role-playing, que han permitido trasladar los conocimientos teóricos a situaciones simuladas. Se ha hecho especial hincapié en la importancia de saber manejar los silencios porque, en muchas ocasiones, escuchar de forma activa es más valioso que emitir una respuesta inmediata. Asimismo, se ha destacado la necesidad de que los profesionales actúen con preparación y sensibilidad para evitar generar un daño añadido.
La formación de la Unidad de Salud Mental del HUPR ha sido directa, clara y, sobre todo, centrada en el objetivo de que fuese útil, ya que como se ha repetido varias veces durante la jornada, “hay que hablar del suicidio, pero hay que saber cómo hacerlo”.
El Ministerio de Sanidad tiene disponible, marcando el número 024, una línea telefónica de ayuda a las personas con pensamientos, ideaciones o riesgo de conducta suicida, y a sus familiares y allegados.